No sé si en Mieres no se escucha Rock, si el programa de Vanessa apenas tiene audiencia, si como ocurre en el resto de este país, para que la gente acuda a un concierto haya que llamarse Fito, Marea, Mägo de Oz, o ser guiri y costar 36 Euros…, no lo sé. Lo que si sé es que Oviedo está a escasos 18 Km., que allí fue donde se forjó El Murciélago y que allí ha nacido un colectivo, “Oviedo no suena”, que intenta remediar esto, un colectivo principalmente formado por músicos, que deben ser los únicos preocupados porque Oviedo no suene. 

En fin, vamos con lo que nos ocupa, que son los grupos. Los encargados de abrir la fiesta fueron Gaia , que jugaban en casa y eran los conocidos por el público. Su actuación se basó principalmente en la presentación de su recién estrenado primer larga duración, “A la Sombra de un Sueño”, que prácticamente se ponía a la venta ese mismo día. El concierto se abrió como el disco, con ese latir de corazón que dio paso a “Corazón de Hielo”, “Buscando un Sueño” y “Tristes Recuerdos”. Siguieron con temas antiguos, su gran éxito, “Volver a Empezar”, el autobiográfico “Gaia”, otro par de los nuevos, “Almas Gemelas” y “Quimera”. Llega “El Hijo de Dios”, en el que Patty deja ver el gran chorro de voz que posee y que maneja a su antojo, dejando boquiabiertos a propios y extraños. Otro par de los nuevos, “Música” y “Háblame”, que dieron paso a los bises, 2 versiones a su manera del “We Will Rock You” y “Long Live Rock & Roll”. 

Balacera llegaban como unos perfectos desconocidos al Principado dispuestos a conquistar sus corazones y ya lo creo que lo consiguieron, y eso que el público no era precisamente el suyo, pero las tablas que demostraron sobre el escenario, con unos compenetradísimos Maki - Alfonso - Jandro, la magistral diestra del joven aprendiz de Ritchie Blackmore (Baki) y los continuos devaneos de Juan Carlos con el público, hicieron que rápidamente se los metieran en el bolsillo. Comenzaron, como no podía ser de otra forma, con “Acuérdate de mis Ojos”, “Calor Siberiano”, “Freak Power Generation” y la primera versión, “Modesta”. Otro bloque de temas propios alternando temas nuevos del “Ninguna Bala Perdida” (“Sin Mirar”) con antiguas de “La Azarosa Peripecia del Ideal” (“Si Me Das” y “Al Monte”) que finaliza con otra versión, “Noelia”, al ser de unos ilustres asturianos, Madera Rock, muy celebrada y coreada por el respetable. Otro bloque como el anterior: “No es Tarde Aún”, “Trileros”, el increíblemente bueno “Encadenado” y otra versión, la balacerizada “Rojitas las Orejas”. 

A estas alturas el público no estaba solo en el bolsillo sino que también estaba totalmente entregado, así continuaron hasta llegara los bises y con ellos la traca final, “No se Vende el Rock & Roll” (que una vez más fui invitado a estropearla), “Jartos D´aguantar” y, como no podía ser de otra forma, “Mis Amigos” y ese final purpeliano que se suelen marcar y que puso broche a una estupenda velada que sirvió para demostrar que Balacera es uno de los grupos más exportables que tenemos en León y ver el nacimiento de una hermosa amistad entre Gaia y Balacera, que tuvo su continuación 15 días después en el pub Locura de Astorga con el mismo resultado tanto en los cojones que le echaron las bandas, como en la poca asistencia de público, y eso que en esta ocasión era gratis. Pero eso es otra historia… 

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