¿Tato? Soy Roberto, quedamos en 15 minutos para tomar unas cañas antes del concierto, ok ? Vale tronko, en cuarto de hora en la parada de metro de Gran Vía. Madre mía, no voy a parar en casa ni cinco minutos. El día se hizo largo, entre clases y reuniones me han dado las mil. Joder, la verdad es que de mil amores me quedaba hoy en casita. Me lavo la cara y salgo a la calle pensando en lo mismo, qué pocas ganas de ir a un concierto, ya les veré en otra ocasión, total, a los Idiotas ya les he visto varias veces y más veces que les podré ver, no? Cenita rápida con Roberto y Nacho, y rumbo a la Pequeña Bety.

Poquita gente, pero qué alegría ver a la tropa de Valladolid al completo. Bien, nos da el tiempo justo para terminar una cerveza. Los Idiotas suben al escenario. La especteción propia de los conciertos de rock en el ambiente. Empiezan a tocar su famosa intro instrumental y en seguida me percato de que algo no está siendo como otras veces. Joder qué cabrones, están a tope desde la primera canción !!. Pelayo a la batería suelta leña para dar y tomar dando una expansión brutal al sonido del grupo y llenando el aire de chispas, haciendo que los platos de su batería se agiten sin parar y pareciendo que van a salir disparados de un momento a otro; Lissa rasga las cuerdas de su guitarra como si le fuera la vida en ello y canta con una fuerza envidiable, despidiendo mala baba a diestro y siniestro

Los Idiotas tienen la virtud de hacerte creer en lo que hacen, porque ellos son los primeros que creen en sí mismos y lo comunican, con una pasión y una energía tremendas. Y ahí está la clave de sus conciertos, la pasión que le ponen, su actitud convence a cualquiera. Pero es que además sus canciones son buenas. Muy buenas. Y si no escucha sus singles en Slovenly e Iekk! Sounds y me cuentas. Ya en la tercera ó cuarta canción estaba absolutamente metido en el concierto y toda sensación de cansancio había desaparecido. Es más, me estaban cargando de energía !. Su garage-punk rockanroleante se había apoderado de mí y sólo podía menear la cabeza de arriba a abajo. Y yo me lo quería perder, juass !! Casi se me cae la babilla con las nuevas canciones que presentaron, cada vez componen mejor ó a mí eso me parece. A ver si sacan más que me dejaron con ganas.

Apoteósico final con un Lissa tirándose por el suelo entre el público, absolutamente poseído. Bestial.

Resumiendo, conciertazo de los Idiotas en la Pequeña Bety. Lástima que no viniera más gente de Madrid. Ellos se lo perdieron.

Por: Tato.

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